martes, 8 de noviembre de 2011

UN MUNDO FELIZ




            Obsesionado por superar a Huxley, cortó y pegó, pegó y cortó, para finalmente suprimir, todos aquellos caracteres que, a su juicio, sobraban en la singular utopía a la que había dedicado su vida. Cuando el dictador concluyó la obra, ya no quedaba nadie vivo a quien mostrar el resultado.

18 comentarios:

  1. Muchas gracias al equipo de Triple C por incluir este microcuento en su colección de marcapáginas.

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  2. Muy bueno Pedro,
    Merecida publicación.
    Un abrazo,

    Xavier

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  3. Muy bueno. Una gran lección sobre las cosas que importan, ¿por qué será que nunca hacemos caso? El marcapáginas es precioso.

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  4. aupa peter
    enhorabuena. ha quedado muy chulo. le estan quitando trabajo a nagore...

    un abrazo hobbit

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  5. Buen micro para tenerlo de marcapáginas.

    Besos desde el aire

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  6. Me encanta, Pedro. Un buen micro para tener en ese marcapáginas. Es muy "chulo"

    Besitos

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  7. Muy bueno, queda genial en los marcapáginas y además esconde una moraleja muy apropiada para este tipo de soporte. Abrazos.

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  8. Pregunta que me corroe. ¿Verdaderamente tenía algo que contar? Sólo así entendería la tardanza...
    :)
    Me pido uno de esos separadores...

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  9. Vengo a visitarte desde el Microrrelatista, y creo que ha sido buena idea, muy buena idea.

    Saludos

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  10. Es que hay que teorizar menos y experimentar más.

    Un abrazo, Pedro.

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  11. Pues nos hemos reunido en Mendoza a través de nuestras palabras. Las tuyas, impecables!!!!

    Un gran abrazo, Pedro

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  12. Como de costumbre, Pedro, no he podido leerte puntualmente. Veo que tu relato puede tener varias caras, y varias lecturas.¿Realmente trata sobre la pérdida del tiempo precioso? No sé...yo creo que esos muertos no fallecieron por el transcurso del tiempo, ¿no? Más bien por los recortes de ese aprendiz de creador de sociedades perfectas.También en este personaje cada cual podrá ver a quien sus paradigmas le conduzcan, claro. Un abrazo, genio.

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  13. Aplausos a este gran "pequeñín".
    Estar en la comparación es vivir de la sombra de ese otro, a quien paradójicamente quiero superar. Qué desperdicio.
    Un abrazo a lo genuino y otro, muy grande, para ti, Pedro.

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  14. Hola Pedro. Comencé a leerte a través de Cocoroko Rock, y nunca defraudas. Enhorabuena.

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  15. Que impresionante ese final. Me parece un fantástico micro, todos los elementos funcionan a la perfección.

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